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Beneficios de montar en bici

Por Miguel Ángel Araque Martínez
beneficios de montar en bici

¿Por qué montar en bici si es tan incómodo? Si la sensación de montar en bicicleta cuando llueve o hace frío no es precisamente muy agradable, si las vías adecuadas para los ciclistas o los aparcamientos destinados a las bicis escasean en muchos pueblos y ciudades… realmente, ¿cuáles son los beneficios de ir en bici?

A pesar de todo lo dicho anteriormente, es necesario cambiar el chip, ponerlo en modo optimista para poder disfrutar de los beneficios de montar en bici, un deporte que engancha. El Grado Medio de Deporte es una de las vías para conocer desde dentro el mundo que rodea a la bicicleta y desarrollar la pasión por este medio de transporte que ofrece al deportista multitud de beneficios.

Beneficios del ciclismo para la salud

Montar en bicicleta es una práctica deportiva dinámica que permite descubrir lugares y establecer nuevos retos según las rutas elegidas. Además, es una actividad que puede practicarse con amigos para reforzar vínculos o de manera individual, lo que permite al deportista desconectar de la rutina y relajarse. Pero esto no es todo, ya que los beneficios de montar en bici son especialmente notables en el estado de salud de aquellas personas que realizan esta actividad:

Vivir más tiempo

Sanchis-Gomar, Olaso-González, Corella, Gómez-Cabrera y Vina (2011) concluyeron en su estudio que los ciclistas del Tour de Francia viven unos ocho años más de media que el resto de la población; interesante, ¿no?

Conclusiones parecidas son las que sacan Fishman, Schepers y Kamphuis (2015), quienes afirman que los holandeses que hacen su rutina diaria montando en bici viven de media unos seis meses más que aquellos que no la utilizan. ¿Tendrán las bicicletas algo que ver con que Holanda sea uno de los países europeos con mayor esperanza de vida?

Corazón y organismo más sanos

Practicar ciclismo regularmente mejora la circulación de la sangre en nuestro cuerpo, reduciendo las posibilidades de sufrir enfermedades cardiovasculares. Del mismo modo, montar en bici fortalece los músculos del corazón, hace que la frecuencia cardiaca en reposo disminuya y reduce los niveles de grasa en sangre. Además, mejora la tolerancia a la glucosa (lo que ayuda a prevenir la diabetes) y reduce el colesterol.

Cáncer y ciclismo

Existen muchos estudios que relacionan cáncer y deporte, disminuyendo las probabilidades de padecerlo si una persona realiza actividad física o deportiva. En el caso del ciclismo, se habla de que contribuye a reducir el riesgo de tener cáncer de intestino, así como cáncer de mama.

Prevención y tratamiento del sobrepeso y la obesidad

Un estudio australiano establece que un 60% de las personas que van al trabajo en coche sufren riesgo de padecer sobrepeso, mientras que esta probabilidad se reduce un 20% en aquellas que emplean la bicicleta diariamente para tal fin.

Por otra parte, los ciudadanos que sufren sobrepeso u obesidad y quieren tratarlo deben comenzar realizando actividades de bajo impacto físico, de manera que sus articulaciones no sufran mucho al soportar el peso corporal. Por este motivo, actividades como la natación o el ciclismo son muy recomendadas en esta población, ya que, además de la propia ayuda del ejercicio, son dinámicas más sencillas que reportan beneficios de manera notable en poco tiempo. En este sentido, algunos estudios británicos demuestran que montar en bici media hora al día supone una quema de 5kg de grasa al año.

Ritmo personalizado

Este es un factor clave que hace que uno se “enganche” a las dos ruedas. El ciclista es quien marca el ritmo de su actividad, por lo que cualquier persona, independientemente de su edad y su estado físico puede practicarlo. Montar en bicicleta apenas depende de factores externos (a excepción de la climatología), por lo que le da libertad a la persona que lo practica y le permite variar la intensidad y volumen de ejercicio a su gusto.

Se trata de una actividad física donde la técnica no tiene mucha relevancia siempre y cuando hablemos del ciclismo como afición y no como deporte. En este último caso, la técnica pasa a ser una parte muy importante, encontrando diferentes modalidades como el descenso o mountain bike.

Además de todos los factores referidos anteriormente, montar en bici tiene un componente social, ya que se genera cierta empatía entre sus participantes. Una escena recurrente en el ciclismo es encontrar durante la práctica a otros deportistas realizando su ruta y que se produzca un saludo o incluso se mantenga una conversación sin necesidad de conocerse.

A modo de conclusión, se plantea una reflexión: si niños, jóvenes, adultos o mayores emplean la bicicleta en sus desplazamientos diarios, se podría decir que estarían practicando actividad física, mejorando notablemente su estado de salud, siendo más autónomos, conociendo a gente nueva con sus mismos intereses y reduciendo la contaminación del entorno en el que conviven.  Dicho esto, ¿necesitas más motivos para montar en bici?