La generación Z está entrando al mercado laboral y, con ella, nuevas maneras de buscar empleo. Por ello, hoy hablaremos de cómo usar las redes sociales para encontrar trabajo. Y es que hace tiempo que se acabó lo de ir de empresa en empresa entregando el currículum y la carta de presentación en mano. Toca adaptarse a las nuevas plataformas digitales y aprovechar todas sus funcionalidades, pues no sólo sirven para hacer amigos o subir fotos y reflexiones. Instagram, Facebook, Twitter o LinkedIn son algunos ejemplos de estas aplicaciones que están día tras día en boca de todos y que pueden ser muy útiles para facilitar la entrada al mercado laboral. El mundo digital se está expandiendo rápidamente en todas direcciones, llegando incluso a eclipsar la forma tradicional y descubriendo una nueva forma de buscar empleo. Sin más demora, vamos a lo importante: ¿cómo usar las redes sociales para encontrar trabajo?
¿Cómo buscar trabajo en LinkedIn?
LinkedIn es la madre de todas las redes sociales a la hora de buscar trabajo. Con una interfaz muy atractiva y faćil de usar, simplemente tendrás que crear tu perfil (como un currículum digital) con distintos datos acerca de tu experiencia laboral, formación, habilidades y logros e ir creando tu propia red de contactos con gente que conozcas (o no). Una vez tengas el perfil creado, simplemente tendrás que acceder a la pestaña de ‘Empleos’ y filtrar acorde a las características, sector o ubicación que busques.
Al principio puede dar algo de pereza, pero una vez tienes tu perfil creado, sólo tendrás que encargarte de actualizarlo y de ir solicitando las ofertas de trabajo que consideres. Eso sí, antes de seguir con las otras redes sociales, vamos a ver una serie de consejos que debes cumplir sí o sí en LinkedIn para causar una buena impresión a los reclutadores.
Consejos para mejorar el perfil de LinkedIn
Es muy importante tener en cuenta algunos aspectos que nuestro perfil de LinkedIn debe tener para aumentar nuestras posibilidades de encontrar trabajo.
En primer lugar, la foto de perfil debe ser lo más formal posible. Al fin y al cabo, esta forma parte de la primera impresión que estás dando y, lo que hay que tratar de buscar es plasmar una cierta profesionalidad, con un perfil limpio, completo y sincero (mentir a la hora de buscar trabajo no suele acabar bien).
En segundo lugar, el resumen de tu perfil debe ser conciso. Breve y bueno, doblemente bueno. No te enrolles contando tu vida, sé formal pero directo, máximo alrededor de 2000 caracteres.
Por último, crea una red de contactos. Esto es algo muy importante porque al final gracias a esos contactos en común estás llegando a mucha más gente que no sabía de tu existencia y que, quizás, estén interesados en contar con tus servicios en un futuro. Añade a tus amigos, profesores, compañeros de clase, gente de renombre de tu sector, etc. Es muy importante también que te mantengas activo; de poco sirve crear un perfil de LinkedIn y tenerlo abandonado y sin actualizar.
Con tu perfil de candidato y tu red de contactos, ya puedes empezar a investigar las miles de ofertas de trabajo que encontrarás en la plataforma.
Facebook, Twitter e Instagram para buscar empleo
Si bien todas estas plataformas no están estrictamente destinadas al mercado laboral, también pueden ser de gran utilidad para buscar empleo.
Facebook cuenta, por ejemplo, con una pestaña de empleo (al igual que LinkedIn) que puede ser muy útil para encontrar ofertas de trabajo. Además, al igual que Twitter e Instagram, siempre podemos seguir a los perfiles oficiales de las empresas que nos interesen y, así, enterarnos de las distintas vacantes que aparecen o incluso seguir a distintos portales de empleo para enterarnos de las novedades en ellos.
Al igual que con LinkedIn, ayuda bastante tener un perfil limpio y profesional. No conoces los gustos o las manías de tus posibles empleadores, por tanto, es importante no subir contenido inadecuado y, si es posible, orientar tu perfil hacia el sector o el trabajo que quieras dedicarte. Al final, este perfil es un escaparate de tu personalidad así que, al igual que sigues consejos para el currículum y la carta de presentación tratando de mostrar tu mejor versión, con las redes sociales igual.
Cada "maestrillo tiene su librillo", estos trucos no son ningún tipo de pócima mágica que te vaya a hacer encontrar trabajo en dos días, pero pueden ayudarte mucho. Al principio cuesta un poco, pero no te rindas. ¡Mucha suerte en tu entrada al mercado laboral!