En nuestro país, el aumento de la práctica deportiva del ciclismo de carretera es una realidad que podemos observar diariamente. La bicicleta es uno de los medios de transporte más sostenibles, y aporta claros beneficios tanto para el medio ambiente y el tráfico urbano como desde el punto de vista de la salud de las personas. Se trata, por tanto, de un medio de transporte que debe ser fomentado.
Vivimos en una tierra de grandes ciclistas profesionales como han sido Federico Bahamontes, Pedro Delgado, Miguel Indurain, Oscar Pereiro, Carlos Sastres, Alberto Contador y Alejandro Valverde. Sin embargo, el ciclismo amateur cada vez es más frecuente, tanto de carretera como de montaña, modalidades que se estudian en el Grado Medio de TECO.
Con la proliferación del ciclismo amateur y del turismo activo se producen también muchos accidentes ciclistas, ya que los practicantes no conocen en profundidad las reglas ciclistas de circulación. Asimismo, cada año fallecen decenas de ciclistas y otros muchos son heridos, lo cual nos hace pensar que tanto conductores como ciclistas tienen que entenderse y respetarse para reducir estos riesgos.
¿Cómo deben actuar los conductores para evitar accidentes ciclistas?
- Cuando adelante a un ciclista, el conductor debe respetar una distancia lateral de al menos 1,5 metros.
- El conductor puede rebasar la línea continua central para respetar la distancia lateral de seguridad al adelantar a un ciclista.
- Para mantener esas condiciones de seguridad, es necesario reducir la velocidad cuando se aproxima a un ciclista para realizar la maniobra de adelantamiento. Si es necesario el conductor deberá reducir su velocidad hasta la de los ciclistas.
- En un cruce o rotonda, un grupo de ciclistas de carretera debe comportarse como un único conjunto, como un único vehículo. Una vez haya entrado el primer ciclista en la rotonda, los conductores que se incorporen a esta tendrán que ceder el paso a todo el pelotón.
- El conductor no solo debe preocuparse de los ciclistas que circulan en su sentido sino también de los que vienen en sentido contrario. Está prohibido poner en peligro a los ciclistas que circulan en sentido contrario al adelantamiento.
- Ante la ausencia de un carril bici o arcén señalizado, el ciclista utilizará parte de la calzada. Si el arcén es insuficiente, el ciclista puede utilizar parte del carril habilitado para automóviles, siempre situándose al lado derecho y ocupando el mínimo espacio posible. Cuando los ciclistas de carretera circulen en grupo, serán considerados como una única unidad móvil a los efectos de prioridad de paso. En circulación urbana se adaptará a lo dispuesto por la ordenanza municipal correspondiente.
¿Cuáles son las normas de circulación de ciclistas?
- Los ciclistas en carretera tienen permitida la circulación en paralelo, siempre y cuando lo hagan de dos en dos y sin obstaculizar la marcha normal de otros vehículos, evitándose en casos de tráfico complicado o condiciones de visibilidad reducida.
- En las vías interurbanas, es obligatorio el uso del casco homologado. Esta norma sí guarda algunas excepciones, ya que el ciclista no tendrá que llevar el casco puesto en rampas ascendentes, en condiciones de extremo calor o por decisión de su médico, en cuyo caso deberá estar debidamente acreditada.
- No está permitido circular en bicicleta utilizando el teléfono móvil o haciendo uso de auriculares.
- El ciclista de carretera no deberá hacer ciclismo bajo los efectos del alcohol o de otras sustancias psicotrópicas, ya que esta es una falta grave que acarrea el pago de una multa.
Sin embargo, por muchas infracciones que cometa una persona mientras hace ciclismo en carretera, nunca se le restarán puntos de su carnet de conducir si lo tiene, ya que no es necesario contar con una licencia de conducción específica para bicicleta, y no van ligadas.
¿Es seguro el ciclismo de carretera en España?
El Instituto de Seguridad Vial de Fundación Mapfre realizó un estudio sobre cerca de 2.400 ciclistas fallecidos y lesionados en los años 2010-2012. Entre 2003-2012 se produjeron en España entre los ciclistas:
- 711 víctimas mortales: 537 en vías interurbanas y 174 en vías urbanas
- 4.896 heridos graves: 2.706 en vías interurbanas y 2.190 en vías urbanas
- 25.400 heridos leves: 7.631 en vías interurbanas y 17.769 en vías urbanas
- 31.007 víctimas totales: 10.874 en vías interurbanas y 20.133 en vías urbanas
En el estudio se puede observar las condiciones en las que se producen los fallecimientos de ciclistas.
- El 21% de los ciclistas fallecidos se produce en zona urbana y el 79% en carretera.
- El 21% de los ciclistas fallecidos tiene nacionalidad u origen distinto al español, un resultado muy llamativo y que debería ser considerado, por ejemplo, a la hora del diseño de campañas de prevención.
- Igual de llamativo resulta el hecho de que también el 21% de los conductores de los vehículos a motor implicados también tiene nacionalidad u origen distinto al español (casualmente, el mismo porcentaje en el caso de los ciclistas).
A la conclusión que se puede llegar sobre los resultados del estudio y sobre los casos de accidentes con ciclistas es que hay que tener:
- Mayor concienciación de los conductores sobre los ciclistas cuando se va adelantar
- Mejor señalización sobre la frecuencia de ciclistas en las carreteras secundarias.
- Utilizar las zonas transitables de la calzada en la mayor medida, los ciclistas (arcenes, carril bici o zonas de la calzada más próxima al arcén).
- Carreteras en mejor estado al igual que los arcenes (los arcenes están llenos de cristales, piedras, alambres, lo cual ocasiona pinchazos).
- Concienciación de los ciclistas respetando las normas de circulación (semáforos, stop, rotondas,…)
- Concienciación de que la utilización de auriculares provoca distracción, descuido.
Otro dato que saca a relucir este estudio sobre el ciclismo en carretera es la importancia de las lesiones en la cabeza en el caso de los fallecidos queda claramente reflejada en el hecho de que en más de la mitad de los casos se consideró que la causa principal probable de la muerte había sido un traumatismo cráneo-encefálico (uso del casco homologado). Esta circunstancia ocurre en su mayoría en las zonas urbana donde el casco no es obligatorio.
Sin duda, el ciclismo es un deporte con multitud de beneficios tanto para el practicante como para su entorno y por ello su práctica se está popularizando en los últimos años. Por ello, es importante que el TECO, en calidad de guía en rutas ciclistas, sea consciente de la importancia de respetar las normas cuando se circula por carretera para procurar la seguridad e integridad de su grupo.