FP Deporte

La práctica del socorrismo acuático

Por Francisco Peralta
Socorristas andando por la arena de la playa

El socorrismo acuático es una disciplina muy importante que la sociedad debe tener en cuenta como herramienta para reducir el número de accidentes que se produzcan en el medio acuático. Para ello, es importante tener una formación básica que comience por estudiar un Grado Superior en Enseñanza y Animación Sociodeportiva.

Muchas de las personas piensan que realizar un salvamento acuático es lo que se ve en algunas series como, por ejemplo, ‘Los vigilantes de la playa’, pero lo cierto es que esta acción requiere de unas técnicas y esfuerzo específicos que los especialistas conocidos como socorristas acuáticos tendrán que llevar a cabo.

¿Hay alguna diferencia entre salvamento y socorrismo?

Fuera del ámbito del medio acuático, las personas creen que hay diferencias entre salvamento y socorrismo, pero ambos son sinónimos. El salvamento acuático se entiende como el conjunto de destrezas, normas y conocimientos que se emplean para proteger, vigilar y atender a las personas que asisten a diferentes áreas acuáticas de deporte. En este sentido, el socorrismo acuático también es relevante cuando se producen inundaciones en algún punto del país.

Según el Informe Nacional de Ahogamientos (INA) realizado por la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo, en 2019 murieron en España un total de 440 personas por ahogamiento no intencional en los espacios acuáticos. Además de esta cifra, los especialistas también tienen que visualizar las condiciones, ya que estos accidentes en una piscina no es igual que si se producen en altamar, donde aumentan las dificultades de rescate.

En la mayoría de ocasiones, las causas por la que se producen los ahogamientos y el socorrista acuático tiene que intervenir no ha cambiado mucho en relación con los últimos años. Los principales factores van desde el atrevimiento excesivo en zonas acuáticas desconocidas hasta las insuficientes medidas de prevención e intervención de las diferentes actividades acuáticas.

Por ello, los expertos aseguran que el socorrismo acuático no es únicamente una adquisición de conocimientos y habilidades de rescate, sino que recomiendan que estas medidas preventivas se aprendan desde edades tempranas, sobre todo en adolescentes. Además de hacer una labor de concienciación por parte de los medios de comunicación.

Asimismo, el salvamento acuático se centra en tres aspectos fundamentales a llevar a cabo cuando se produce un accidente en el medio acuático: salvamento preventivo, aplicando las normas; seguridad acuática, anticipándose a los riesgos; y rescate acuático, actuando ante situaciones de peligro.


La figura del socorrista acuático

Una de las salidas que tienen los estudios relacionados con el ámbito deportivo como el ciclo formativo de Enseñanza y Animación Sociodeportiva, entre otros, es optar por un puesto de socorrista acuático, una de las figuras más importante en el salvamento acuático. De este modo, el profesional de dicha disciplina estará capacitado y acreditado para prevenir, vigilar y atender a las personas en el medio acuático, garantizando su seguridad, así como brindando una respuesta inmediata de rescate.

El socorrista acuático podrá ejercer cuando haya una situación de peligro tanto dentro como en los alrededores de espacios con agua, destacando las áreas acuáticas de recreación, turismo, lagos, piscinas o playas. Además, es una profesión reconocida por diferentes autoridades locales y regionales.

Este profesional del socorrismo acuático se encargará de reconocer las condiciones de riesgo, indicar a los visitantes las medidas de seguridad, reconocer a las víctimas en situación de peligro, entrar en el agua, ayudar a las personas que sufran un accidente acuático y brindar los primeros auxilios básicos.

Por otro lado, el socorrista acuático para concluir con éxito su trabajo y salvar una vida tendrá que contar con los materiales necesarios que le permita realizar sus funciones con eficacia, así como le ayude a reducir tiempo y riesgo en los primeros pasos del rescate. Entre estos equipamientos destacan los aros salvavidas, la tala de rescate, la bolsa de rescate o la férula espinal.

El salvamento y socorrismo deportivo

El salvamento y socorrismo deportivo es un deporte desconocido en España, pero esta disciplina destaca porque hay un alto nivel para competir en campeonatos internacionales. Además, resulta muy atractivo para los espectadores por las diferentes y variadas pruebas que se realizan, distintas a las de natación. Por ello, el salvamento acuático no solo se entiende como una profesión, sino también como un deporte.

En este sentido, el salvamento deportivo surge en un primer momento de la importancia de los profesionales del socorrismo acuático para mantener una buena condición física y psicológica. Aunque, como se ha mencionado, en España tiene pocos adeptos, presenta muy buenos resultados a nivel nacional e internacional.

El salvamento deportivo es una disciplina minoritaria que no cuenta con muchos estudios de alto impacto, por lo que su evolución es más complicada y dificulta que este deporte sea más competitivo para llegar a un mayor número de participantes. Igualmente, el amplio bagaje de elementos característicos del salvamento y socorrismo deportivo hace que se desvincule totalmente de la natación, contando con su propia federación como es la Federación Española de Salvamento y Socorrismo (FESS).

Por otro lado, los entrenamientos de salvamento y socorrismo deportivo a los que se someten los deportistas de esta disciplina son muy exigentes, debido a que las pruebas a realizar requieren de múltiples destrezas como velocidad, fuerza y habilidad.


Función de la Federación Española de Salvamento y Socorrismo

La Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo (FESS) es la encargada de regular las competiciones de salvamento deportivo en España, cuyas pruebas oficiales que se realizan en un campeonato del mundo son de piscina y de aguas abiertas (verano), ambas en modalidad individual y por relevos.

Varios estudios demuestran que en salvamento y socorrismo deportivo no existe una gran diferencia entre participantes de diferentes sexos, dato interesante conociendo que en la mayoría de las disciplinas deportivas de España predomina ampliamente el sexo masculino sobre el femenino, aunque muchos especialistas opinan que todavía es necesario potenciar la participación femenina en esta disciplina.

En definitiva, el socorrismo acuático es una acción que puede ayudar a salvar muchas vidas en este medio. Por otro lado, diferentes expertos creen que el auge que tiene el salvamento y socorrismo deportivo se debe de aprovechar para concienciar a la sociedad de lo importante que es seguir las normas en el medio acuático, ya que en ocasiones hay un desconocimiento generalizado.