FP Sociocultural

Importancia del deporte inclusivo en el ámbito escolar

Por Victoria Pérez
Niña sonriente en silla de ruedas pasándole una pelota de baloncesto a un adulto

La Integración Social en el aula es un aspecto que cada vez se hace más necesario en el ámbito escolar, donde en los últimos años se ha comenzado a conceder importancia a la inclusión de los alumnos con diferentes necesidades específicas de apoyo educativo. Una de las materias pendientes en el entorno escolar y extraescolar es el deporte inclusivo, que supone una forma dinámica de integrar al alumno en el grupo a través del juego, fomentando valores como la empatía, el juego en equipo y el liderazgo.

A través de la promoción de una educación física inclusiva, el profesor o monitor puede conseguir no solo la participación activa del alumno con necesidades específicas, sino también que el resto de compañeros sean capaces de ponerse en la piel del otro, poniendo en práctica los deportes que han conocido toda su vida aunque limitando el uso de alguna de sus capacidades, ya sea sensorial o motora.

Acciones para fomentar la inclusión deportiva

Tanto en el contexto escolar como en el extraescolar, el monitor debe estar concienciado sobre las barreras existentes entre deporte y la discapacidad para favorecer la práctica del deporte inclusivo con alumnos con diferentes necesidades. En este contexto surge el Especialista en Inclusión Deportiva en el Ámbito Escolar y Extraescolar, una formación centrada en el conocimiento de los diferentes tipos de discapacidad que pueden presentar los participantes y cómo adaptar la práctica deportiva al marco escolar.

Con esta formación se tratan las diferentes discapacidades motoras, sensoriales e intelectuales y de qué manera abordarlas a través del deporte inclusivo. Entre las principales acciones que debe plantearse el monitor se encuentran:

  • Flexibilización del currículum académico para favorecer la integración del alumno con necesidades específicas. De esta manera, el profesor adaptará la práctica deportiva a las capacidades del alumno para que pueda cumplir con los objetivos del juego.
  • Designar a un alumno de apoyo que destaque por sus habilidades en el deporte a realizar y que pueda ayudar al participante con necesidades específicas durante el desarrollo de la actividad, consiguiendo que pueda integrarse en el equipo.
  • Uso del juego sensibilizador como herramienta para generar empatía entre el resto de compañeros, poniéndoles en los zapatos del alumno con discapacidad para comprender las dificultades con las que afronta la actividad deportiva.

 

Clasificación de discapacidades

Existen diferentes tipos de clasificación de discapacidades, pero en este caso nos podemos quedar con una más superficial que contempla la discapacidad de una manera genérica en función de la forma en la que esta influye en la práctica de ejercicio físico. En este sentido, se distingue entre discapacidad física, sensorial e intelectual.

En primer lugar, la discapacidad física supone una alteración funcional o bien la falta de una parte del cuerpo, generando una disminución de la movilidad. Por su parte, la discapacidad sensorial afecta generalmente a la capacidad de ver u oír de manera parcial o total, alterando además el sentido del equilibrio y la concepción del espacio. Finalmente, la discapacidad intelectual implica limitaciones del funcionamiento de las habilidades adaptativas, sociales y prácticas.

Beneficios del deporte inclusivo en la escuela

Aunque los beneficios del deporte son múltiples, especialmente en edades tempranas, la actividad física favorece la inclusión en la escuela por diversas razones. Por un lado, el deporte inclusivo fomenta la visibilidad de las diferentes discapacidades y su normalización, todo ello en un entorno lúdico y cooperativo.

Desde la perspectiva de una persona con necesidades específicas, el deporte le permite interactuar con sus compañeros, trabajar en equipo y mejorar su autonomía, así como su bienestar físico y emocional. En el caso de los niños con discapacidad intelectual, la práctica de un deporte les permite interiorizar reglas, trabajar en equipo y agilizar su mente a la hora de procesar órdenes y planificar sus actos; en el caso del resto de discapacidades, el deporte promueve además su agilidad, coordinación y, en algunos casos, les permite mejorar su estado de salud.

 

Ejemplos de actividades de deporte inclusivo

  • Voleibol sentado. Esta actividad sigue las mismas normativas que el voleibol común, pero se practica con una red a ras del suelo y todo el equipo jugará sentado. El objetivo será anotar un punto en el campo del equipo contrario. Otro deporte que se puede practicar de manera similar es el bádminton sentado.
  • Carrera de relevos a ciegas. Con esta actividad el objetivo es concienciar sobre la realidad de las personas con discapacidad visual. Para su realización, los alumnos se pondrán por equipos y, con los ojos vendados, deberán guiarse por la voz de su compañero para llegar hasta él y darles el testigo. Generalmente, los compañeros se situarán en diferentes puntos de la pista para que el que entrega el relevo tenga que guiarse por sus indicaciones. El último de los componentes del equipo se colocará en la línea de meta y será el encargado de asegurar que su equipo llegue hasta el final. Esta actividad se realizará en un terreno liso para evitar accidentes.
  • Baloncesto en silla de ruedas. Este deporte es uno de los más populares en el ámbito paralímpico y de los que más repercusión mediática presenta. Sin embargo, el baloncesto en silla de ruedas es una opción solamente válida para centros que cuenten con este equipamiento, aunque siempre pueden hacerse adaptaciones de esta modalidad. En caso de contar con sillas de ruedas en el centro, también puede llevarse a cabo la práctica de tenis adaptado.
  • “¿Quién es el líder?”. Este juego puede servir como calentamiento antes de la práctica deportiva. Para llevar a cabo la actividad, el profesor cogerá a tres alumnos y sin que los demás se enteren, designará a un líder. Este realizará una serie de movimientos y los otros dos deberán imitarle sin que los demás se den cuenta de quién es el verdadero líder. El resto de compañeros tendrán que adivinar quién es el que dirige mientras imitan todos sus movimientos. Con esta actividad se estimula el desarrollo cognitivo en personas con discapacidad intelectual, trabajando su atención, autonomía y trabajo en equipo.

En conclusión, el deporte inclusivo es vital en la educación de los niños, conociendo los diferentes tipos de discapacidades y siendo capaces de ponerse en la piel de las personas con necesidades especiales. Además, favorecer la integración de estas personas desde la infancia, esta labor de divulgación y concienciación puede realizarla el Técnico Superior en Integración Social a distancia, especialmente en el ámbito extraescolar.